Que alguien sugiera que tu dolor, tu duelo, tu perdida te va a ayudar a crecer es violencia.
Nadie desde fuera deberiamos decirte lo que tienes que sentir.
Nadie desde fuera deberiamos señalarte ningún trayecto.
Ninguno somos adivinos. Ninguno sabemos como va a ser el recorrido de tu dolor.
La responsabilidad de la recuperación progresiva de tu bienestar no recae solo en ti además. Muchas veces es cuestión de la suerte y el azar: de los profesionales que te acompañen en el proceso, del apoyo de tu entorno familiar y social, de lo traumático de la propia experiencia, de una situación laboral que te permita el tiempo que necesitas sin presiones, de tu economía…
La suerte y el azar…
Hace algo más de un año, tras despertarme de la anestesia en el Hospital hice sin querer un ¨experimento sociológico¨en donde pude ver a pequeña escala la presión del entorno para ¨recuperarme¨, ¨ser positiva¨,¨ser la de antes”, sintiéndome culpable ¨por ser una exagerada “.
Aun así , yo también he metido la pata con mis palabras. A veces por querer aportar y otras porque hay experiencias de otros que a una misma pueden removerle sentimientos y vivencias propias.
No es fácil tener la valentía de decir que nos han hecho daño, que esas palabras ahora y así son innecesarias y duelen.
Tampoco es fácil escuchar y aceptar desde la humildad que la hemos podido cagar bien.
