
Un ombligo lleno de recuerdos
En un momento del embarazo mi piel se estiró y el ombligo se abrió dejando ver no poca roña, y algunas cuantas cicatrices en el. Una estría en forma de cruz lo atraviesa. Esa estría es la única que tengo en mi barriga tras cuatro embarazos. Es enorme y me salió tras el parto y nacimiento de Ander. Una marca de un antiguo piercing me recuerda mi adolescencia y un enorme miedo a quitármelo a mis cercanos 29, dejando soltar de esta manera, una etapa que finalizaba para dar la bienvenida a ese deseo maternal real y presente en mí.